hubo una época
que vi tanto, escuche tanto
descubrí más mundo
del que mi imaginación
había sido capaz de crear.
que con el tiempo
y el hecho de esperar
el milagro
que nunca apareció
sentí envidia.
tanta envidia
que quise ser iluminado
como el resto.
y al ver que nada sucedía
sentí odio.
tantísimo odio,
que me aparte de la gente,
de los iluminados,
me aparte de todo aquello
que vi, oí, y descubrí.
y solo quise olvidar
todo ese nuevo mundo
que me fue mostrado únicamente a mí
para volver a estar como antes:
ciego, sordo, ingenuo y feliz.
Hubo una época que fui ciego, sordo, ingenuo y feliz.
descubrí más mundo
del que mi imaginación
había sido capaz de crear.
que con el tiempo
y el hecho de esperar
el milagro
que nunca apareció
sentí envidia.
tanta envidia
que quise ser iluminado
como el resto.
y al ver que nada sucedía
sentí odio.
tantísimo odio,
que me aparte de la gente,
de los iluminados,
me aparte de todo aquello
que vi, oí, y descubrí.
y solo quise olvidar
todo ese nuevo mundo
que me fue mostrado únicamente a mí
para volver a estar como antes:
ciego, sordo, ingenuo y feliz.
Hubo una época que fui ciego, sordo, ingenuo y feliz.
1 comentarios:
Padre Nuestro, de todos nosotros,
¿por qué nos has olvidado?
Padre Nuestro, ciego, sordo y desocupado,
¿por qué nos has abandonado?
Publicar un comentario